El otro día vimos Avatar... también vimos El Origen... hoy hago una analogía de ello y me doy cuenta que estos últimos dos meses, estos dos últimos maravillosos meses viví en un sueño que no era precisamente la realidad.
No. La realidad es a la que volvimos hoy. Esa en la que todos los martes tienes que tomar un bus que te arranque de casa y te devuelva aquel lugar que roza con el cielo.
Me acostumbré a verte, me acostumbré a tenerte, no sé cómo me voy a concentrar para volver a mi realidad, quizá estoy durmiendo, quizá acabo de despertar, me encantaría que mi totem no dejara de girar.
Espero te den vacaciones, ya me había acostumbrado a tenerte para las cosas importantes. Me hice ilusiones con ese día, ese día que hace muchos años no tiene sentido para mí. Espero que leas esto y que sientas lo mucho que creo en estas líneas.
Que la nieve no te atrape... que te mande a casa y te aloje en mis brazos.
Te Espero...